«Ninguna historia es una sucesión de acontecimientos sino el relato de esa sucesión, y obedece más plenamente a las leyes de la literatura que a las de la ciencia o la política», Horacio Vázquez-Rial.
«Me gustan las casas abiertas, llenas de amigos y hasta de desconocidos. Pero con el tiempo eso fue cambiando. Supongo que tiene que ver con la edad, con el hacerse mayor, con el hecho de que los amigos que no están muertos están lejos o hasta han escogido estar solos, lo que no es mi caso», dice Horacio en un artículo publicado en éstos días en Libertad Digital, titulado «Visitas».